miércoles, 29 de julio de 2009

Cincuenta

No sé si aún tenga corazón,
pero a juzgar por el dolor en el punto exacto,
pareciera que si, que me queda algo...

No sé si hoy sean 50 o mas las ocasiones,
en que mi corazón ha sentido un desgarre,
un rompimiento, un quebranto...

Pero a juzgar por el dolor en el punto exacto,
pareciera que si.

No hice caso de las advertencias,
ignoré tomar las precauciones.
Como si mi corazón fuera de acero,
me aventuré y lo puse por delante.

Merezco este castigo por exponer así mi corazón.
Por dejarlo inofensivo.
Por jugar al cazador sin armas, sin argumentos, sin esperanzas...

No sé si aún puedo vivir con el corazón tan roto,
pero a juzgar por el dolor en el punto exacto,
me siento a punto de morir.

Y es que el riesgo de amar asi nomás, sin protección,
sin precaución y accidentadamente, es que tarde o temprano,
el corazón se quiebra, se rompe inevitablemente... incorregiblemente.

No sé si este corazón sane algún día,
pero a juzgar por el dolor en el punto exacto,
siento que me abandona.

50 veces quizá parezcan pocas,
pero, para un corazón tan lastimado
y a juzgar por el dolor en el punto exacto,
parecieran definitivas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario